Los amantes del cine y la moda están de celebración, porque este lunes, 20th Century Studios dio inicio al esperado rodaje de la secuela de El Diablo Viste a la Moda, película que marcó a toda una generación en 2006. La producción, a cargo de 20th Century Studios (propiedad de Disney), confirmó que contará con el regreso del elenco original, encabezado por Meryl Streep, Anne Hathaway, Emily Blunt y Stanley Tucci.
A ellos se suma Kenneth Branagh, quien se incorpora al universo de Runway para interpretar al esposo de la icónica Miranda Priestly, personaje inmortalizado por Streep.
El anuncio se hizo oficial a través de la cuenta de Instagram del estudio, donde se compartió un teaser con dos zapatos rojos, evocando el cartel original, y las voces de las protagonistas. Además, se reveló que la película llegará a los cines el 1 de mayo de 2026.
Aunque los detalles de la trama se mantienen bajo reserva, el medio Variety adelantó que la historia explorará los retos de Miranda Priestly en una industria editorial en crisis. Según la sinopsis publicada en IMDB, Priestly se enfrentará a Emily Charlton (Blunt), su antigua asistente, ahora convertida en una poderosa ejecutiva de un conglomerado de lujo que domina el mercado publicitario que Priestly necesita desesperadamente.
El futuro de Andy Sachs (Hathaway) en esta nueva entrega aún es incierto. En la primera película, la joven renunciaba a Runway para seguir una carrera como periodista en un periódico. Su reaparición plantea interrogantes sobre su evolución personal y profesional.
Estrenada en 2006 y dirigida por David Frankel (quien se espera repita su rol en esta secuela), El Diablo Viste a la Moda recaudó más de 326 millones de dólares a nivel mundial y se consolidó como una comedia de culto. Basada en la novela homónima de Lauren Weisberger, la cinta mostró el lado más glamoroso y despiadado de la industria de la moda.
Con la confirmación del elenco original, una trama actualizada y una industria editorial en plena transformación digital, la secuela promete revivir el espíritu afilado de la primera película, pero adaptado a los desafíos del presente.
